Sabemos que es muy
difícil para los humanos trasladarse de un lugar a otro caminando o en
bicicleta y este mal hábito se ha implementado en la vida diaria de distintas
personas, dejando atrás la preocupación de cuidar nuestro medio ambiente y
nuestro cuerpo.
Es considerable aprender
nuevas mejoras para nuestra persona y quienes nos rodean.
Por ello hagamos el
esfuerzo en recorrer ciertas distancias caminando o en bicicleta, para evitar
más contaminación en el aire que respiramos, además de salvar a nuestras
próximas generaciones de enfermedades que sean crónicas en su vida.
Además de evitar que haya
menos cantidad de árboles y plantas que se dañan también por el uso de los
automóviles. Recordando que estos seres vivos nos ayudan a respirar brindándole
oxígeno a nuestro aire.
Construyamos el propósito de usar más nuestro cuerpo o bicicleta para
trasladarnos, evitando la contaminación de la tierra.
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